Todo es cuestión de método, y sin un buen método las cosas no funcionan.A lo largo de la semana he ido apreciando la involución de mi método de estudio. Primero lo regulaba por la cantidad del avance, luego por el número de horas y a esta altura por mi nivel de cansancio. El cómputo final de la suma de las estrategias aún es incierto para esta mente tan dispersa, que ya sólo piensa en ver buenas películas o dormir todo el día ¡Qué flojera!
ÁnimooOOo para mí jajaj
Y para mis lectores misterio que estén pensando en vacaciones :P
¡Lleguen vacaciones!
No hay comentarios:
Publicar un comentario