A pesar de que estoy poniendo todo mi empeño en controlar los sucesos de mi vida, para que me salgan tal como los planifico, me resulta difícil, hasta desgastante; pero al final de cuentas estoy comprobando que los resultados se están acercando a lo planificado o incluso hay algunos que han salido mejores de lo esperado. Compruebo en carne propia, huelo el valor genuino, de la frase: difícil, pero no imposible.Nada es fácil en la vida. Vivimos en un mundo equivocado, con personas equivocadas o que se equivocan, y con nustras propias equivocaciones. Convivir con ello, es parte de los costos fijos que tenemos que pagar para seguir viviendo.
Lo terrible es que te pillan de improviso, que a veces cuestan caro, y no hay ni una tarjeta de crédito para poder pagarlos en cómodas cuotas. Se pagan al contado y en cualquier segundo que se presenten.
Para conseguir cosas hay que tener persistencia, pero la persistencia tiene que ver con la motivación y el agrado. A veces se presentan tremendas cuotas de costos fijos que nos pueden llevar hasta un hoyo y matarnos la motivación.
Por mi afán de controlarlo todo, hoy siempre pienso en la posibilidad de que me toque pagar altos costos fijos de sopetón; no se trata de ser pesimista y temeros@; al contrario, ser siempre positiv@ pero preparad@ para el pago de esas contribuciones que uno tiene que pagar para tener una vida digna.



